Solo el que pierde algo querido y amado sabe del dolor, solo aquel que ha requerido a la justicia la perdida de un ser querido, sabe lo que es el desengaño. Nadie sabe del dolor de un padre si no el padre; ni el de una madre mejor que una madre misma. La madre justicia, muchas veces no es tan justa, es el pecado capital del hombre. Todos somos iguales ante la ley, pero no ante la justicia. P.D. Todo el que antepone el poder, al amor es un fracasado moral.