Todas las actividades comunitarias y empresariales destinadas a alcanzar un objetivo dado, utilizan una variedad de recursos tales como personas, financiamiento, materiales, tiempo y conocimiento. Nosotros, como simples ciudadanos o consumidores, siempre estamos conscientes de la estrategia y procedimientos que siguen los directivos para administrar eficientemente los recursos y acercarse al cumplimiento de los objetivos. Deberemos estar atentos( y no dejarnos seducir por los cantos de sirenas), a identificar a los candidatos que poseen los siguientes atributos: Una visión global de la comunidad y conocimiento de los mecanismos legales y reglamentarios de solución de sus problemas, además de creatividad para aprovechar las oportunidades de desarrollo que se presenten. Cercanía con la gente (pero positiva); y capacidad de comunicarse afectivamente, demostrable con una limpia trayectoria de servicio público y con la leal adhesión de un equipo de trabajo. Capacidad legal y técnica para redistribuir recursos y focalizarlos en los problemas más graves de la comunidad: desigualdad social, desempleo, delincuencia, violencia intrafamiliar, marginalidad, estacionalidad de la economía, etc.
En conclusión: No deberíamos desperdiciar nuestro interés en candidatos que no puedan demostrar ninguna capacidad de gestión edilicia. Quienes basen su campaña sólo en dádivas y tandas publicitarias tratando de parecer “buenas personas” nunca serán capaces de resolver los problemas globales de la comuna ni las necesidades particulares de los ciudadanos.
P.D.Si te engañan una vez no es culpa tuya, si te engañan dos si ...
